Lo que debes hacer si no puedes pagar tu hipoteca
Muchas familias atraviesan problemas económicos y les resulta difícil afrontar los gastos de una hipoteca. Si eres una de las personas a las que se les han ido acumulando las deudas y ya no puedes pagar las cuotas mensuales, no desesperes, tenemos una serie de recomendaciones para ti.
Lo primero que debes saber es que al momento de un impago el banco te hará una advertencia, diciéndote que está obligado a cobrar la deuda. Si los impagos continúan en los siguientes cinco meses, el banco iniciará un proceso en el que subastará tu casa para asegurar el cobro del dinero que te prestó. Pero, si el banco al vender la vivienda no cubre el total de la deuda, seguirá cobrándote el valor restante e incluso podría llegar a embargarte el sueldo hasta que recuperé todo el dinero. Ahora bien, si ya estás inmerso en esta situación lo ideal es no perder la vivienda, pero si esto no es posible, es bueno que minimices los daños. Para lograrlo, puedes aplicar los siguientes pasos:
Anticípate y habla con el banco
Si sabes que no vas a poder pagar la próxima cuota, lo mejor es que acudas al banco y le plantees la situación. La idea es hacerle ver que quieres pagar pero por alguna razón resulta difícil afrontar la cuota actual. Esta forma de actuar te puede ahorrar muchos disgustos. Recuerda que el banco prefiere cobrar, así sea más lento. No tengas vergüenza de pedir ayuda, todos pasamos por problemas financieros y los encargados están allí para ayudarnos a buscar una solución.
Comprueba si tu contrato hipotecario cuenta con seguro
Cuando se establece un préstamo hipotecario generalmente incluye un seguro de protección de pagos. Lo recomendable es que compruebes si dicho seguro está contemplado en tu contrato y con qué condiciones. Es frecuente que este tipo de seguro cubra las cuotas por períodos hasta de un año.
Negociación
Si no cuentas con el seguro de protección de pagos, lo siguiente que debes hacer es dirigirte a la entidad bancaria para negociar. Algunas de las soluciones que te puede ofrecer son:
Establecer un acuerdo para reestructurar los términos del crédito hipotecario de forma permanente, extendiendo el plazo o sumando el monto de las mensualidades atrasadas al total del préstamo. También puedes pedir un plazo para liquidar el total del monto vencido en mensualidades o pedir una prórroga por incumplimiento de pago en donde se suspenden los pagos por un periodo acordado. Al cumplirse el tiempo deberás ponerte al día.
Como última opción puedes vender tu casa. En este caso, el comprador deberá pagar el saldo del crédito hipotecario y si sobra algo, será para ti. De esta forma estarás solvente y tendrás un ingreso extra.